La Comisión Ejecutiva de ADELPA, celebrada este lunes 20 de junio, adoptaba de forma unánime su posición al respecto, considerando que las ventajas del proyecto deberían pesar más que las diferencias entre las partes, pues está en juego el futuro de los pueblos del Pirineo de Aragón y Cataluña.
La Ejecutiva de la Asociación de Entidades Locales del Pirineo Aragonés se reunía este lunes para abordar la candidatura olímpica de invierno 2030 entre otros asuntos. Eusebio Echart, vicepresidente de ADELPA, ponía el acento en “que el retorno que esta cita olímpica habría tenido en nuestro territorio un gran impacto no solo económico, sino también turístico, dándose a conocer a nivel nacional e internacional, y así habría sido una forma de mostrar a todo el planeta la calidad paisajística de la cordillera”.
ADELPA aprobaba por unanimidad un documento manifestando la postura de la asociación, que brindaría al Pirineo “una oportunidad para mejorar infraestructuras necesarias para el futuro de nuestro territorio, que no puede ser desaprovechada”. Refiriéndose en este sentido, entre otras, a carreteras, “costosas y de difícil financiación, que permitirían avanzar a nuestros municipios”.
El documento reconoce que “las localidades del Pirineo son las primeras interesadas en el respeto al medio ambiente, por lo que cualquier proyecto futuro debería realizarse de una manera sostenible para garantizar que las próximas generaciones puedan recibir estas montañas en las mejores condiciones ambientales”. También es importante, “que se tengan en cuenta criterios de sostenibilidad social, para que las inversiones que se hagan redunden en un futuro mejor para el bienestar de la sociedad pirenaica”.
ADELPA pide que una candidatura futura implique una representación conjunta de todo el territorio pirenaico, aragonés y catalán, criticando la falta de acuerdo en este sentido para lanzar un proyecto que suponía una gran oportunidad y que además “debería darse en unas condiciones de equilibrio entre las partes, siendo fundamental que todas las zonas con nieve de Aragón estén representadas, contando con todos los municipios y entes territoriales implicados”.
Eusebio Echart apelaba a la generosidad de las partes para una candidatura que tiene “unas ventajas que deben pesar mucho más que las diferencias entre esas partes, pues está en juego el futuro de cientos de pueblos de Aragón y Cataluña, y el prestigio de los Pirineos a nivel global”.