La Asociación ha presentado alegaciones a los criterios que permiten identificar los suelos agrarios de Aragón sobre los que se podrá autorizar la implantación de plantas de generación de energías y que han estado expuestos a información pública hasta el pasado 18 de junio.
El texto de la Dirección General de Desarrollo Rural excluye, como norma general, los suelos de regadío en tierras de cultivo arables y tierras con cultivos leñosos permanentes, y aquellas zonas de concentración parcelaria en ejecución, mientras que, no se aplican restricciones en el caso de los suelos de secano.
Desde ADELPA se considera que, aunque el regadío juega un papel fundamental en la agricultura aragonesa, los criterios para autorizar la instalación de plantas de energía renovables deben reflejar la diversificación de usos de los suelos agrarios de Aragón, que van más allá del regadío. Entre otros, prácticas agroecológicas, cultivos de vides en altura o frutales de montaña que también merecen ser protegidas y promovidas por sus beneficios ambientales, económicos y sociales, y sin olvidar otros cultivos más propios de zonas de montaña como son los de secano húmedo, que, generalmente, van ligados al desarrollo de una explotación ganadera, en cuyo caso, destinar este terreno a la instalación de renovables implica ‘quitarlo’ del aprovechamiento ganadero.
La integración de energías renovables en zonas agrarias debe ser, ha señalado Begoña Dorado, presidenta de ADELPA, “cuidadosamente equilibrada sin comprometer la productividad agrícola y sin la exclusión total de renovables en ciertos tipos de suelo que pueda limitar oportunidades de desarrollo sostenible”. Se deben “diseñar proyectos que coexistan con la actividad agraria, generando beneficios adicionales para las comunidades rurales” añade Dorado.
Por ello, se ha pedido a la Dirección General de Desarrollo Rural que revise los citados criterios para que sean más inclusivos y protejan la diversidad de usos de los suelos agrarios que existen en Aragón, no sólo el regadío o parcelas con cultivos registrados de las Denominaciones de Origen (DO), sino también las numerosas actividades y prácticas que contribuyen a la riqueza y sostenibilidad del sector agrario aragonés.
Además, se solicita que se respete lo establecido en la disposición adicional primera de la Ley 6/2023, de 23 de febrero, de protección y modernización de la agricultura social y familiar y del patrimonio agrario de Aragón, sobre las medidas de compatibilización de las energías renovables en zonas agrarias, y que se incluya en dicha protección los suelos agrarios de la Red Natura 2000.
Por último, ADELPA ha pedido al Gobierno de Aragón que desarrolle las herramientas necesarias para que sean los Ayuntamientos, tengan o no un plan general de ordenación urbana (PGOU), los que decidan dónde y cómo quieren implantar este tipo de instalaciones de generación de energías renovables.