La Red Natura 2000 es la red de lugares protegidos a escala comunitaria, que actualmente se encuentra en proceso de creación. La existencia de esta red se deriva de lo establecido en la Directiva de Aves de 1979, y la Directiva de Hábitats de 1992, que regulan respectivamente las Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPAs) y las Zonas de Especial Conservación (ZECs); el conjunto de ZEPAs y ZECs de todos los países de la Unión Europea constituirán la RED NATURA 2000.

Los hábitats y especies recogidos en la Directiva de Hábitats se consideran amenazados o sensibles a escala europea. Ahora bien, el conocimiento de su distribución y su estado de conservación en cada Estado miembro es dispar. Por ello, la primera fase del proceso de designación consiste en que cada estado realice a escala nacional una evaluación científica precisa de todos los hábitats y especies de interés comunitario. Sobre esa base se localizan los lugares importantes y se proponen en una lista nacional que se presenta en la Comisión Europea.

Ante la generalizada falta de información acerca de este proceso en Aragón, desde la Asociación de Entidades Locales del Pirineo Aragonés (ADELPA), se solicitó en el mes de Octubre de 1999 a la Dirección General del Medio Natural del Departamento de Medio Ambiente de la DGA, toda la información y documentación acerca de los Lugares de Importancia Comunitaria (LICs) propuestos hasta la fecha por la DGA en el ámbito de ADELPA (el Pirineo Aragonés), así como la relación de municipios afectados por estas propuestas y la información sobre los hábitats acuáticos y prioritarios presentes en todo el Pirineo aragonés (adjuntamos las cartografías correspondientes a esta información).

La propuesta de LICs presentada en su día por el Gobierno de Aragón y cuyo contenido nos fue enviado, se ha ampliado posteriormente en lo correspondiente a las regiones biogeográficas alpina y mediterránea, que afectan (especialmente la primera) a buena parte del Pirineo aragonés.

En lo que respecta a la región mediterránea en Aragón, tiene unas condiciones ambientales que mantiene una serie de singularidades ecológicas de gran interés para la biodiversidad europea. En esta zona aparece desde una vegetación típicamente esteparia que a veces se salpica de saladares, pasando por comunidades vegetales características de zonas de yesos, formaciones forestales del bosque mediterráneo, hasta, en zonas muy localizadas, paleoendemismos de origen tropical que quedaron aislados con las glaciaciones (sotos y bosques de ribera, localizados en ambiente de severa sequedad). En definitiva, los LICs de esta zona en Aragón comprenden un total de 120 lugares localizados por toda la geografía aragonesa y , principalmente en el Prepirineo, Valle del Ebro, Sistema Ibérico de Zaragoza, Montes Universales y Gúdar-Javalambre.

Por otro lado, con fecha 22 de diciembre de 2003 la Comisión Europea aprobó definitivamente los LICs de región alpina. Con ello vienen a añadirse 959 lugares (94.460 Km cuadrados) a la Red Natura 2000. El conjunto cubre el 37 % de la región alpina, que incluye cuatro cadenas montañosas: los Alpes, los Pirineos, los Apeninos y las montañas de Fenoscandia.

De los Pirineos aragoneses se han incluido 40 espacios de gran valor medioambiental, con una superficie de 232.000 has. en dicha lista, estableciendo, así, una mayor protección de dichas zonas y de sus especies animales y vegetales.

Entre estos 40 espacios figuran lugares de tanto valor como Posets-Maladeta, Ordesa y Monte Perdido, las turberas de Anayet, Tendeñera, Cotiella o las Cuevas de Villanúa. También incluyen la cuenca del río Yesa, el Alto Valle del Cinca, los puerto de Panticosa, Bramatuero y Brazatos, la Sierra y Cañones de Guara y la Cueva de los Moros.

La Directiva de Aves dispone también la designación de lugares para conservar los hábitats de las especies de aves más amenazadas, así como de las especies migratorias y concede especial importancia a la protección de los humedales.

Actualmente, el principal empeño de ADELPA en cuanto a esta cuestión es que se materialicen las ayudas para la financiación de los espacios que se han de integrar en la Red, y que en el Pirineo aragonés suponen un importante porcentaje de superficie.

El motivo es que desde las entidades locales del Pirineo, se entiende que para que esta red tenga éxito se ha de contar con las administraciones y los habitantes del Pirineo. Y para que éstos se impliquen en los proyectos de conservación, que en la mayoría de los casos suponen limitaciones de uso o de otro tipo, necesariamente se han de arbitrar y financiar medidas de desarrollo alternativo, compatible con los objetivos medioambientales de esta Red de espacios protegidos.